Friday, March 1, 2019

Honrando las conexiones que nos permiten crecer

Hoy terminando una reunión de equipo con Pablo, Nacho y nuestra coach de equipo, Sandra, tuve un momento de luz, donde pude ver los grandes puntos de conexión, que fueron abriendo posibilidades a RAS en toda su historia. 

Voy a honrar al sistema, mi DIOS, dejando que se exprese a traves de mis palabras.
Agosto de 1997, yo tenía 17 años, viajé desde el departamento de La Paz, Mendoza... a la ciudad de Mendoza, a visitar a mi hermana Inés, que vivía con una familia amiga. En esta familia, habían dos niños llamados Gustavo y Mariana, y jugábamos en la plaza, cuando salió el tema de los padrinos, y les comenté que hacía muchos años que no veía a mis padrinos. Mariana me dijo, y porque no les llamás??, dije bueno, buscamos monedas, llamé me atendió Silvia mi madrina, y me dijo, venite que es el cumple de mi hijo Sebastian, y de mi papá. 

Me fui para su casa, la pasé hermoso, y cuando volvía a La Paz, mi padrino, Osvaldo Ianardi, me llevó a la terminal de ómnibus. Mientras esperábamos el horario, le conté mis ideas, mis ambiciones, mi vocación por la informática, mi espíritu emprendedor, no se que fué realmente, pero lo inspiré y me dijo: NO TE VAYAS A BS AS, quedate en Mendoza, más cerca de tu familia, trabajá en la Clínica Santa Rosa, estudiá en la Universidad Mendoza (privada), cuando te recibas tendrás buenos contactos, ya que los padres de los alumnos de las universidades privadas, están bien posicionados. 

No la pensé más, decidí en el acto, y en unos meses ya estaba haciendo el preuniversitario en la carrera Ingeniería en Informática. Gracias Silvia Imperiale, Osvaldo Ianardi, Seba, Fabri, Andru, por esos 5 meses que compartí con ustedes, siempre estaré felizmente agradecido en mis primeros pasos. Gracias también por esos años donde viví en la Clínica Santa Rosa, habitación 109, y por las largas noches de charlas con los enfermeros y grandes amigos como Adrian Charcos, mi gallo!!..

Trabaje muchos años en la Clínica Santa Rosa, aprendí el sector salud, sus reglas, sus vicios y aciertos, sus posibles mejoras, entendí y me hice sensible a la preocupación de la gente como paciente, las demoras en los tiempos, el problema del papel, etc.

Nadie es profeta en su tierra, en unos años, casi por terminar la carrera, busqué otros desafios para aplicar mis conocimientos, y renuncié a mi amada Clínica Santa Rosa, que me vio crecer y donde hice grandes amigos, entre ellos mi reemplazo en informática, Pablo Santi.

Entré a trabajar en Vialidad Provincial de Mendoza (DPV) gracias a Lucas Irusta, compañero de la Universidad, donde aprendí sobre sistemas web, servidores linux, redes, resolución integral ente lo político, lo técnico y lo económico.

Un día, trabajando en Vialidad, con otro compañero de la universidad, Sebastián Pérez Lacon, hablamos con Javier Ronda, un ex compañero que se había ido a vivir a Australia, nos dijo: lean estos dos libros PADRE RICO, PADRE POBRE... y ... LOS 7 HÁBITOS DE LA GENTE ALTAMENTE EFECTIVA. 

Los 7 hábitos, no lo pude terminar esa vez, pero cuando leí PADRE RICO... me voló la cabeza, automáticamente comencé a recomendarlo a TODO el que podía... entre ellos, me llamó un día Pablo Pizarro, mi actual socio, y otro compañero de la Universidad, y me dijo, no se en que enfocarme, no se si JAVA u ORACLE... a lo que le respondí, ni ORACLE ni JAVA, lee este libro: PADRI RICO...  En unos días me contactó super motivado, para que nos juntemos a charlar y contarme algunas ideas. 

20 de Julio de 2006 fué el día del café, con la servilleta rayoneada... Hagamos SAAS.. Software as a Services, en EEUU está creciendo, y en 2013 comenzará un crecimiento, y para el 2020 será el BOOM.. Dale, busquemos socios, Daniela y Sebastián, y nos presentamos en la Incubadora de empresas de la Universidad Nacional de Cuyo, quien nos acompaño muchos años. Nos propusimos hacer sistemas para bodegas, pero en 2008, una gran persona que hoy no está físicamente con nosotros, Dr. Daniel Coria Mondati, director médico de la Clínica Santa Rosa donde trabajé muchos años, en un asado en casa de Silvana Pineschi, me dijo: estoy abriendo en unos meses un centro médico innovador Terrazas Alta Medicina, y no tengo sistema!!..

Hablé con mis socios, contratamos a Osvaldo y Fernando, y comenzamos a programar RAS SALUD. Renunciamos a nuestros trabajos, y nos metimos de cabeza en esto. Todo parecía la película PIRATAS DE SILICON VALLEY, hasta que la plata se acabó, no podíamos terminar el sistema, faltaban dos meses para que Terrazas abra sus puertas, tuvimos que despedir parte del equipo,  Daniela renunció a la sociedad, luego renunció Sebastián. nos quedamos con deudas en las tarjetas de Pablo, y en el fondo del pozo, tirados en el piso, llegamos a un estado de serenidad.. ya nada peor podía pasar, solo quedaba subir. Así que nos paramos y nos preguntamos abandonamos RAS? o NOS HACEMOS MILLONARIOS CON RAS?.. Cuanto querés ganar vos, me dijo Pablo, le dije, unos U$S 10 millones en 2020, bueno, otros U$S 10 millones yo dijo, más la ganancia de inversores, debemos crear una empresa de U$S 180 millones. Dijimos listo!!.. comencemos!!.. Dijo Pablo entonces... ¿Estas seguro, mirá que es mucho trabajo? y le dije: 100% seguro. 

Al poco tiempo, pudimos poner el sistema en Genera Salud, donde sume otro mentor, al Dr. Ricardo Echegoyen, socio del Dr. Daniel Coria Mondati, en la Clínica Santa Rosa, y de mi padrino Dr. Osvaldo Ianardi. Todos me enseñaron grandes valores de base, que dieron firmeza al  contrapiso donde crece RAS. 

En Terrazas, conocimos a Mariela Santiago, una secretaria inquieta, me di cuenta al instante que ella sabía un montón, y que era rápida para aprender. Le di el visto bueno a la consultora que hacía las entrevistas, la contrataron, como a otro grupo de secretarias muy capaces,  aunque menciono a Mariela, porque fue clave para unir otros puntos de conexión.

Su capacidad de aprendizaje, la hacía aburrirse en trabajos rutinarios, así que cada algunos meses, cambiaba de trabajo, la contrataban en otra clínica, quemaba los cerebros de los dueños para que contraten RAS SALUD, y luego se iba a otra clínica... así sucesivamente durante algunos años, nos permitió entrar en más de 7 clínicas directamente, y decenas indirectamente.

Un día, en su clínica nro, 5 o 6, me dijo que vaya a ver a un cliente en La Barraca, que llevaba la parte de Imágenes, Leonardo Petkovic, porque ella le había hablado de RAS, cuando fuí, terminé cerrando la venta con Leonardo, pero para mi sorpresa, también nos contrató Centro Médico La Barraca. Al entrar en la Barraca, empezaron a contratarnos centros médicos más chicos, consultorios, y demás empresas de los mismos médicos que trabajaban ahí. En poco tiempo, ya eramos rentables, y podíamos vivir de esto.

Me sentí más seguro para dar el gran paso, conocí a Pamela, mi esposa, y juntos trajimos a nuestro primer hijo Mateo. Él ayudó ese año, cuando al nacer trajo el pan bajo el brazo, ayudado por Pablo Santi, un gran amigo y compañero de crecimiento, que me recomendó hacer constelaciones familiares, donde mejoré la relación con mi padre (tomé a mi padre) haciendo una cuarentena de 60 días, y las sesiones de coaching con Sandra y Carlos en sus comienzos de jóvenes y visionarios coaches.

Al año siguiente, muchos más clientes entraron, entre ellos Florida Salud, donde conocí a Juan Ignacio Melimaci, (Nacho), una gran persona, ambisioso y entregado a crear algo grande, deseoso de dejar su huella en este mundo, se unió al equipo RAS, y hoy es nuestro tercer socio accionista. También nació mi segundo hijo Amadeo, quien trajo la panadería bajo el brazo, además de una sonrisa maravillosa y una capacidad de encantar inspiradora. 

El hecho de tener Centro Médico La Barraca, y por la perspicacia de Nacho sumando al equipo, pudimos vender RAS SALUD en Centro Médico Dorrego, otro de los grandes centros de Mendoza, y que sumó a lograr nuestro mayor cliente: Centro Médico Palmares. También Nacho trabajaba en dos centros médicos que nos contrataron, Carfe Salud y Carrodilla, luego Centro Médico el Sol, Cepa, y así nos fuimos expandiendo..

En 2017, hicimos el lanzamiento de RAS SALUD en su versión 3, un logro gigante a nivel tecnológico, donde reunimos todos nuestros clientes, y conocí a Tano Migliaro, genio emprendedor, los invité al evento, y finalmente terminaron contratando el servicio. De la mano de Tano, conocí a Nahuel Leon, contador, de pensamiento ágil, temperamental y ambicioso en el excelente sentido de la palabra.

Luego entró Centro Médico Chacras, un cliente inspirador por su fuerza emprendedora, los riesgos que tomaron, el enfoque en el resultado esperado, y sus logros en poco tiempo. 

En 2017, más cliente exigían mayor servicio, el pais en su peor año inflacionario, entonces comenzaron a  revelarse nuestras inseguridades personales, nuestros miedos, la forma de trabajar se volvió dificil de llevar, y comenzamos un proceso de declive que terminó en un antiequipo de trabajo. 

Seguimos adelante, buscando crecer en una nebulosa, y al año siguiente en 2018, participamos con Nacho, activamente, en una iniciativa en el salud, NAS,  por invitación de Nahuel, donde contratamos a Carlos, mi hermano con su empresa INSPIRING, para hacer un entrenamiento de líderes, y también incluían sesiones privadas de coaching. Ahí viví una primera transformación interior muy poderosa.

Santiago, el coach que me asignó el equipo de INSPIRING, me preguntó de que querés hablar, y le dije, que me da miedo el crecimiento rápido, entonces me dijo: COMO TE LLEVAS CON TU PAPÁ??.. adentrándome en esa y otras preguntas, y mis respuestas, descubrí que tenía un serio problema con el dinero, por varias razones, algunas muy profundas, sentía que no era leal a los valores familiares, si acumulaba dinero. Sabía perfectamente como crear valor al mundo, es algo que hacía desde más de 10 años. Es decir, sabía dar, pero no sabía recibir, la balanza estaba inclinada. El éxito en forma de dinero, fluía como energía hacia mi permanentemente, pero me las arreglaba para alejarlo de formas creativas y silenciosas. Al entender esto, mi acción fue pedir la bendición de mi padre para dar lugar a la parte que me faltaba, EL RECIBIR. En conclusión, a este paso, le llamo: SER MILLONARIO.

Un día soleado, bajo la higuera de la casa de mi padre, en el departamento de La Paz, Mendoza, le pregunté a mi padre: Me das tu bendición para hacerme millonario??.. y me dijo, SI HIJO TE DOY MI BENDICIÓN, y no tengas miedo de crecer, recordá que siempre fuiste valiente de chico, andá paso a paso, y mirando la higuera dijo: come primero los higos que tenés a mano, y luego buscá los más altos, ya que los de arriba pueden ser mejores, pero también pueden ser solo una ilusión. 

LA CANTIDAD DE ENERGÍA QUE LIBERÓ ese evento en mí, no la puedo explicar, sino por la observación que cada uno podrá hacer de RAS y el equipo que la dirige. Comencé a ver los problemas que estábamos teniendo, me di cuenta que RAS me había ofrecido riqueza durante muchos años y me las había arreglado para no aceptarla, por eso había mucho por resolver. El primer paso, era honrar el pasado, y mejorar la relación entre los socios de RAS, principalmente con PABLO con quién teníamos las mayores diferencias.

Un día de 2018, con más de 80 clientes, viendo que nos habíamos estancado en la innovación, en el servicio, y con un estado de ánimo de resignación general en RAS, acompañe a Carlos, mi hermano, a un congreso de cobranzas, donde escuché su disertación. En ella dijo cómo ayudaban a las empresas a alinear sus fuerzas, dando coaching de equipo y consultoría en procesos, que generaban resultados extraordinarios. Recuerdo que al ir al congreso, pensé que me aburriría, pero al instante cambié mi estado de ánimo a curiosidad, y ahí las posibilidades se abrieron.

Le pedí a Carlos que nos haga una oferta a RAS, para hacer un proceso de entrenamiento, le ofrecí a mi socio Pablo esta posibilidad, con quien estábamos pasando un momento de desunión cada vez mayor, aceptó, luego lo sumamos a Nacho a la oferta y ahí todo comenzó a cambiar.

Empezamos un proceso de coaching de equipo, coaching individual y consultoría de proceso, que nos llevó a otro nivel de conciencia. En las sesiones de equipo, de la mano de Sandra, comenzamos a crear un espacio de escucha activa, donde pudimos comenzar a vernos entre nosotros y nuestras preocupaciones, aprendimos a negociar para que todas las partes ganen, luego empezamos a construir un espacio de confianza que permita gestionar los miedos, y definir un objetivo compartido: MrTurno.com versión 5.

En esta parte, tuve otra gran revelación personal en coahing individual, donde seguí con Santiago, una persona muy experimentada en coaching ejecutivo, y que de alguna forma logramos una conexión muy buena. Esta conexión, me permitió darle autoridad para ir nuevamente al hueso. En una sesión, me di cuenta que habían muchos recursos a mi alrededor que no veía y como resultado un proyecto que tenía a mi cargo, pudo encaminarse de nuevo, junto con un aumento en mi dignidad, Gracias Santiago por esta pregunta, y gracias Pablo Davicino por aceptar mi pedido y ayudarme con tu increible experiencia. En otra sesión con Santiago, tuve otro descubrimiento gigante.

Navegando las preguntas de Santi, me di cuenta, que en mi persona, no había espacio para el éxito, para la responsabilidad, para el festejo de los logros, para la dignidad, para el merecimiento, cosas inpensadas, pero así era. De chiquito fui muy revelde, lo que generó un desentendimiento natural e involuntario de mis padres, y por lo tanto, estuve expuesto. Muy rara vez hacía las tareas en la escuela, no llevaba los materiales a manualidades, aveces no estudiaba para los exámenes porque no los recordaba, y así y todo, fui segundo escolta, como hice?. La respuesta es: desarrollé una gran habilidad para safar ayudado por un carisma de nacimiento, como hoy veo en mi hijo Amadeo, que me comenzó a pesar en la vida adulta. Descubrí que no habían los suficientes logros y festejos, para crear ese espacio de dignidad, se hizo común no saborearla ni desearla ya que no la conocía, también la responsabilidad era escasa, porque había aprendido a safar, era experto en eso, así me entrené para sobrevivir. 

La tarea con Santiago fue crear nuevamente este espacio en mi ser, y comenzó un gran trabajo, como primer medida, IMAGINAR ETAPAS CERRADAS, CERRARLAS Y SABOREAR EL EXITO. Mi esposa Pamela, como dirijida por una mano divina, me dijo un día, voy a hacer un asado con mis amigas en casa, y quiero que vos estés, porque siempre te ponés a hacer otras cosas. Le dije que sí, y en la reunión con las amigas, salió el tema de la carrera, les dije que no la había terminado, y casi al unisono, dijeron... DEBES RECIBIRTE.. CERRÁ ETAPAS, ETC. ETC. En principio me negé, pero luego contando esto a Santiago, me dijo, debés cerrar esa etapa... y con un nivel de conciencia mayor, sin dudarlo DECLARÉ HACERLO. También surgió mi dificultad para superar a mi hermano Carlos, dado que siempre lo vi en un rol paterno, así que también le pedí su bendición, al momento de hacerlo me dijo algo maravilloso: TE DOY MI BENDICIÓN, porque me la pedís, pero LOS UNICOS QUE TIENEN TUS MONEDAS SON EL PAPI Y LA MAMI, nadie más. Eso fué liberador de otro camión de energia acumulada. 

Ahora, estamos en camino de transformarnos en equipo con PABLO Y NACHO.. Asistidos por INSPIRING, con Sandra, Carlos, Pablo, Santiago, con varios meses de desafios por delante, con mayor confianza entre nosotros que nos permite mostrar los miedos, esos mismos que bloquean a escondidas, estamos puliendo semana a semana nuestra relación, y la relación con nuestros clientes. 

Muchas gracias a las personas que caminan en paralelo, evidenciando cada una de estas cosas, como mi hermano Jorge Sanchez, compañero de la vida, que me bancó económicamente y emocionalmente en los altibajos de emprender, gracias a mi gran amigo de la vida Andres Anello, porque cuando nadie más estaba, él estaba, gracias a otro gran amigo Hector Escobar Yau, que me dio una gran enseñanaza para crecer en el momento justo, muchas gracias también, a  Inés, la mamá de Pablo Pizarro, que me alojó cuando todas las puertas se habían cerrado, por mi inexperiencia. Y muchas gracias a mis padres, el apoyo incondicional de mi madre desde siempre, la sabiduría de mi padre que pone a mi disposición en cada charla telefónica, o personal, gracias a mis hermanas Ines, Lachi, mis sobrios, familiares y amigos, que son una gran reserva de amor y fuerza, que me empuja silenciosamente.

Mil millones de gracias a todas las personas que conectaron cada uno de los eventos que nos trajeron a este momento, y perdon de corazón si olvidé contar sobre alguien.

Daniel

Thursday, December 27, 2018

Recuerdos del presente pasado

Y ahí estábamos con 3 cucharas de alpaca cavando para dejar pasar el agua que mi padre había frenado con un tapón de tierra... así estrenaban mi cerebro, los recuerdos de esta increíble vida que decidí transitar una vez más.
Los recuerdos, poderosas perlas que subyacen entre la fantasía y la realidad, relucen al sentir el olor de las hojas de eucalipto quemarse, o el olor a la morenita al resguardarse el sol en verano, ni hablar de un retaca consumida lentamente por el beneficio de alejar los mosquitos. Y así florecen miles y miles de recuerdos que dejaré profundamente escritos en superficiales frases que sólo su alma podrá entender.
Recuerdo los primeros pasos de nuestro perro Tovi en el callejón frente a las granadas.
Recuerdo el perfecto caminito que dejaban las vacas desde el corral al tacho del agua, y que transitaba cada mañana para ordeñar.
Recuerdo la Mocha, la Mochita, la Pachanga y la Pachanguita, como también la Lola.
Recuerdo mi madre amasando 10 kg de haria para hornear 22 panes.
Recuerdo a mi padre trayendo leña con el macho y la mula, con la cadena de gancho y el balancín.
Recuerdo esas tardes de verdolaga y cerraja en la viña de Don Cochelo para los conejos.
Recuerdo también los halcones galácticos en el televisor de Doña Juana a las 18:00 hs.
Recuerdo la frase: Andá a pedir un pan a Doña Juana, decile que mañan amaso y se lo devuelvo, cuidado al cruzar la calle, mirá a ambos lados de la calle antes de cruzar.
Recuerdo las cientos de horas que dedicamos con Jorge a fabricar un autito a pedales sin éxito.
Recuerdo las siestas enteras que Lachi jugaba con la PUKI entre los olivos.
Recuerdo a mis hermanos Carlos e Ines enviándonos a comprar shampu en sachet para bañarse e irse al baile en el salón de actos de La Paz.
Recuerdo el cajón atrás de las bicicletas.
Recuerdo la cosecha de aceitunas, las carpas de cosechadores, el olor a aceite en las mantas que se colocaban debajo del árbol.
Recuerdo recorrer kilómetros arriba de los alambrados con Jorge.
Recuerdo las cuevas que hacíamos en las morenitas y las cañotas.
Recuerdo la balsa en la represa, entre las totoras.
Recuerdo la huerta con frutillas al lado del tranque australiano.
Recuerdo la cosecha de ciruelas Santa Rosa y las damascas bandera española.
Recuerdo a Sergio Denis sonando en los parlantes del club y mi hermana Ines lanzando un tronco de muchos kilos al aire como una pluma al escucharlo.
Recuerdo el cultivo de cebollas con un palo de escoba en la tierra mojada.
Recuerdo el olor a una tormenta que se avecinaba.
Recuerdo la temperatura exacta del agua de lluvia en verano.
Recuerdo el olor a la chepica cubierta de rocío con el cielo rojizo en un amanecer.
Recuerdo la espera del micro de la TAC que llegaba de Mendoza y nos llevaba al pueblo.
Recuerdo los almuerzos de sábado y domingo con los 7 sentados a la mesa.
Recuerdo las siestas de verano metidos en el tacho de agua de las vacas.
Recuerdo el lago de arena debajo del olivo, testigo de las mejores historias.
Recuerdo los autos de juguete que tallábamos con Jorge en ladrillo con un machete.
Recuerdo los pegazos hechos de barro y con plumas como alas.
Recuerdo con emoción a Débacon y las decenas de Debaquin que atravesó antes de morir.
Recuerdo las avispas naranjas arrastrando arañas pollito desde el olmo hasta las paredes de adobe de la vieja casa.
Recuerdo cada cuarto de la casa vieja, su galpón, los gallineros, conejeras y chiqueros que habían en sus cuartos vacíos, y hasta un corral de cabra.
Recuerdo cada carneo de invierno, mi padre buscando vecinos para colaborar, y mi madre haciendo embutidos, chanfaina y preparando la carne para el asado.
Recuerdo la salsa y duraznos al natural, el tacho donde se hervían las botellas, y la mañana siguiente cuando se sacaban para guardarlas.
Recuerdo dormir bajo las estrellas cuando temblaba.
Recuerdo el dulce de leche o ricota que se hacía cuando sobraba leche del a venta diaria.
Recuerdo decenas de dulces de fruta que hacía mi madre con la olla redonda o la olla grande.
Recuerdo pisar la uva descalzo que usaba mi padre para hacer vino (la moledora).
Recuerdo mi madre pidiendo que le haga cosquilla en el brazo.
Recuerdo a mi padre pidiendo que le haga masaje en la espalda.
Recuerdo los cuentos de mi padre antes de dormir.
Recuerdo mi madre horas y días enteros a mi lado cuando enfermaba.
Recuerdo mi madre llevándome en sus hombros del baño a la pieza cuando me bañaba.
Recuerdo los robots que hacíamos de cajas de cartón de té en las noches.
Recuerdo las miles de aventuras que inventábamos con 3 muñecos y 4 autos.
Recuerdo el sol mágico, el sol artificial y las batallas noche a noche.
Recuerdo comer chorizos secos colgados en el techo de mi habitación.
Recuerdo sacar árboles de raíz con mi padre como un juego de paciencia y estrategia.
Recuerdo las caminatas de 5km cuando debíamos ir al pueblo, algo que recuerdo de forma maravillosa aunque mi madre lo hacía por no tener para el pasaje del micro.
Recuerdo las aventuras con mi tío Arturo y sus infinitas enseñanzas.
Recuerdo las carreras de barquitos en la acequia chiquita con mis hermanos.
Recuerdo recorrer las acequias arriba de un tronco flotando.
Recuerdo los patos y gansos, los gallos de riña y los pavos reales.
Recuerdo limpiando el patio en las tardes de verano.
Recuerdo cuando aprendí a andar en bicicleta en ese mismo patio limpio por mi padre.
Recuerdo las obras de teatro con los vecinos, entrenando horas para mostrarla a los adultos.
Recuerdo la primaria de Villa Antigua y su eterno maestro Diaz.
Recuerdo carpintería, los recreos de 15, 10 y 5 minutos.
Recuerdo a Vicente Barahona tocando la campana.
Recuerdo el comedor escolar y los viajes a la Escuela Hogar.
Recuerdo tantas cosas y la vez me parecen tan pocas...
Recuerdo una gran infancia con libertad, placer, plenitud, alegría, velocidad, ingenio, creatividad infinita, amor... resumiendo, recuerdo felicidad.
Gracias por estas simples cosas que recuerdo, simplemente, porque ahora le toca guardar esos recuerdos a mis hijos.
Gracias, gracias, gracias por esta vida que se pone cada vez más linda!!..








Thursday, September 20, 2018

Liderando la vida


En ese camino del emprendedor, que comenzó exactamente cuando recibí el regalo de la vida, me encontré maravillado y curioso, caminando. En ese camino que serpenteaba por valles y sus montañas, llanuras y pantanos, desiertos y selvas, en ese mismo camino caminaba. Transitando inconscientemente alegre, o paralizado temeroso, acortando el camino con infantiles trampas, o desgastado corriendo presuroso. Ahí estaba, mirando el mundo como hoy juzgo, lo ve mi hijo Amadeo de 2 años, que donde pone el ojo, lleva el cuerpo, aunque caiga en la grieta que está delante. Y en ese camino conocí personas, que también caminaban sus caminos, los veía en paralelo varios kilómetros y les ofrecí caminar juntos, aunque no sabía donde iba, pero sabía que quería caminar. Esas personas tenían sus familias y sus historias, sus miedos y ambiciones, y sobre todo, sus verdaderos cuentos imaginarios. Y ahí estábamos todos, caminando hacía allá, día a día, mes a mes, constantes, en linea recta, en círculo, de subida o de bajada, pero siempre caminando. Mi confianza y optimismo eran contagiosos, aunque tuviéramos que pasar por terrenos pantanosos, lo peor era ensuciarnos la ropa, lastimarnos algo, pero siempre habría tiempo de sanar. Así varios años, que se hicieron un lustro, y luego una década, y de todas esas personas, solo quedamos dos, Pablo y yo, rompiendo la comodidad para lograr algo grande. En el transcurso de esos 10 años formé mi familia, unifiqué mi camino con Pame, y juntos le regalamos la vida a dos gotitas de luz que nos llenaron de coraje y miedos. Ya no era tan fácil caminar libremente inconsciente, apuntando al utópico horizonte deseado. La naturaleza milenaria hizo su parte, cual rayo une la tierra y el cielo parpadeando, mis neuronas conectaron mis hemisferios y zaazzz.. la primera de miles de preguntas .. Que estoy haciendo?. Hasta ahora mi intuición me había guiado, mi valentía me mantenía en movimiento, vaya a saber hacia donde, pero ya no era suficiente, claro que no. 

Caminante no hay camino, se hace camino al andar... tantas veces canté esa canción con mi guitarra, y hoy lo podía entender. Beneficiado por la vida que elegí, otro caminante me acompañaba de cerca, mi hermano Carlos. Él me regaló la píldora de la verdadera liberar, cuando me mostró las opciones, tal vez había una píldora azul, aunque solo vi la roja, y todo mi ser me decía que debía tomarla, era la entrada a un nuevo mundo del que acertadamente, Morfeo en la película Matrix, le dijo a Neo: DECIDE BIEN, PORQUE DE LO QUE DECIDAS, NO HABRÁ VUELTA ATRÁS. 

Así conocí el mundo de Fernando Flores, un hombre que con o sin miedos, dedicó su vida, a mi juicio, a hackear la vida humana, hasta escribir parte de su código fuente, y con su emprendimiento Pluralistic Network, lo puso en colores para todos nosotros. Me embarqué en su programa Ser un Embajador de Posibilidades con Nacho, otro caminante que también iba para allá y nos subimos al mismo camino de RAS y del crecimiento progresivo, gracias Nacho!!. Conocimos por primera vez palabras raras, frases incoherentes, básicamente caracteres verdes que bajaban por el pequeño monitor por el que observamos la vida. Varios meses pasaron y fueron cayendo una a una las enseñanzas, fuimos adoptando nuevas prácticas, retrocediendo primero, para avanzar mucho más después. El camino seguía pero ya esta vez, nosotros eramos sus fabricantes, como los antiguos trabajadores ferroviarios que ponían rieles mientras el tren avanzaba con los materiales para seguir expandiendo las vías, así comenzamos a avanzar con más firmeza. En unos meses más, entendí que lo importante no era saber todo, sino caminar junto a personas que sepan más, y avancé con el segundo programa de Fernando Flores, el WEST, un programa para formar líderes que duraría varios meses más. Maravillado avancé en este camino donde conocí la excelencia, la forma de hacer bien las cosas, cómo movilizar personas que no están a mi cargo, básicamente, cómo sumar más personas para construir juntos el camino, y así fue. 

En poco tiempo, éramos muchas personas de diferentes orígenes, creencias, valores.. aportando a construir el camino de mejorar la calidad de vida de los pacientes, esta noble tarea de ayudar a los que nos cuidan y curan. Las posibilidades eran cada vez más evidentes, comenzaron a aparecer nuevos mundos,  nuevos caminantes, y llegó Fede en soporte, Pablito Santi con ITDS, BIOBOX con Fernando y Angel, llegó GURU con Leo, Mati, Emi, Gera, Ale y Guille, llego SendIT con Gabriel, PrestoBots con Maru y Mario, Nahuel con un Estudio Contable modelo, Andres Anello manteniendo equipos de nuestros clientes, Eli con Infodattos, Lucas y Tano Migliaro con su apertura a la innovación, y tantos otros amigos que no alcanzo a nombrar, y con ellos se expandieron nuestras posibilidades de ayudar a más empresas del sector salud. Seguimos algunos kilómetros juntos, y nos dimos cuenta que algo nos faltaba para ser efectivos, en nuestro país viviendo una transformación profunda, y la nuevas metas que nos propusimos de ayudar a más empresas, apareció NAS, el Núcleo Asociativo de Salud, impulsado por la UE. Gracias Nahuel por abrir esta posibilidad que tomamos sin dudar, y gracias Alejandro por tu compromiso con esta iniciativa que hiciste tangible en nosotros. 
Por esas cosas que los planetas disfrutan hacer al alinearse, llego un día Carlos a Mendoza y nos dió una charla a NAS, sobre las relaciones que creamos con nuestros pares R = R, y despejó nuestra ceguera, diciendo: Si quieren que sus empresas mejoren, comiencen por ustedes mismos. En pocas semanas estábamos comenzando con Sandra, Pablo, Santiago y Carlos a través de su empresa INSPIRING, un programa de formación de líderes++, que hoy, al momento de escribir estas palabras, está casi terminando, y en el cual, quiero compartir mi aprendizaje en los siguientes párrafos.

Aprendí que R = R, y esto significa que la calidad de las Relaciones con otras personas, es directamente proporcional a los Resultados. Aprendí que todos los seres humanos, vivimos siempre en un estado de ánimo que nos ilumina u opaca las posibilidades. Aprendí que nuestros cerebros son una máquina de emitir juicios automáticos, que se basan en nuestra historia, y que ayudan a ahorrar energía mental. Aprendí que los juicios son evaluaciones que hacemos de la vida y al darlos o recibirlos, permitimos que nuevos mundos se formen. Aprendí que observamos la vida, a través de nuestra historia, y hay tantas formas de ver el mundo, como personas vivan sobre la tierra. Aprendí que las empresas más innovadoras de la historia, las ciudades y monumentos más maravillosos del mundo, las grandes obras de arte, y mucho más, nacieron con una declaración de un ser humano, una poderosa y tan simple declaración como: Voy a crear una muralla que defienda China de los ataques Mongoles, como también otra simple declaración que creó la empresa más valiosa del mundo: Piensa diferente, Apple.

Aprendí tal vez lo más impactante: "Si los estados de ánimo nos abren o cierran posibilidades para crear nuevos mundos, y se basan en juicios que tenemos sobre nuestras posibilidades de futuro, y esos juicios son evaluaciones que hacemos según nuestros estándares internos, estándares que fuimos construyendo según nuestra cultura, nuestra familia, nuestra trayectoria, y que por lo general somos ciegos que están ahí y nos guían, entonces... si nos hacemos consciente de esos estándares, los podemos ver, y si los vemos, los podemos cambiar y mejorar, y si cambian los estándares, cambian los juicios de nuestras posibilidades de futuro, y si cambian las posibilidades de futuro, cambia nuestro estado de ánimo, que a su vez, nos permite crear un nuevo mundo que no existe, y justamente, es el nuevo mundo que quiero"

Así que acá estoy, caminando y mejorando junto a grandes amigos, grandes personas de las que aprendo permanentemente, agradecido de vivir y descubrir, de ver y escuchar, de oler y degustar lo mismo que antes, pero esta vez despierto, viendo esos lazos brillantes que unen sueños, escuchando promesas que llevan a la acción, buscando equilibrio entre dar y recibir, atrayendo más personas comprometidas a este camino, como Leandro en Paraná, disfrutando el juego de emprender, sintiendo el impacto directo, poderoso, de una declaración, entendiendo que todo tiene un precio que antes no veía sino, hasta muy tarde. 

Gracias INSPIRING, por este programa maravilloso, gracias Sandra por tu entrega profesional desde esas primeras conversaciones de coaching por los comienzos del 2013, hasta ahora, gracias!!.. Gracias Santiago por esa primera sesión y las demás, gracias por ser parte de la PODEROSA FOTO DE MI PADRE EN MI PARED que me inspira día a día, gracias Pablo por la impecabilidad de tus prácticas, que logran que las cosas ocurran y garantizan el cumplimiento de las promesas, y gracias Carlos por este vínculo hermoso que no hace falta explicaciones. Gracias de corazón a mis compañeros de NAS y a seguir trabajando, siento que esto recién empieza y hay mucho por hacer y disfrutar!!..
Abrazo grande.