Una revelación desde el universo...

Sobre la relación del EGO, PARADIGMAS y el ESPÍRITU.

La revelación llegó como esta definición: "El EGO es un conjunto de firmes paradigmas adquiridos en edades tempranas de la vida y reforzados posteriormente".

Sabemos que los paradigmas son conjuntos de hábitos, estos hábitos se forman  a partir de la repetición de actitudes que a su vez son gobernadas por los mismos paradigmas. Como verán es una cadena sin fin que puede durar cientos de generaciones si seguimos hipnotizados.

Bajo esta definición del EGO podemos explicar que al nacer y crecer, en el ser humano se crean paradigmas que hacen a su mejor desarrollo en edades tempranas (Lloro y me dan de comer, me golpeo y me acarician, digo algo y me aplauden, etc.). Pero luego, las reglas del juego cambian y al tomar conciencia encontramos que algo nos frena.

Los miles de paradigmas internos, que controlan el 90% de nuestra vida (según Stephen Covey en su libro "La regla 90/10), pueden o no ser parte del conjunto EGO. Esta definición nos dice que el EGO es un conjunto de paradigmas o creencias muy fuertes. Por esto, al darte cuenta que es el causante de tu truncada evolución, intentas enfrentarlo sin saber que enfrentas al conjunto de cientos de paradigmas que lo forman. En este caso, una opción es "divide y vencerás", si detectas cual es el conjunto de estos paradigmas y los vas cambiando uno por uno, estarás debilitando el EGO, ya que él se nutre de las señales de comodidad que recibe de sus paradigmas.

"Como dos pájaros dorados encaramados en el mismo árbol, como íntimos amigos, el Ego y el Ser viven en el mismo cuerpo. El primero come lo dulce y lo agrio del árbol de la vida, mientras el otro observa con desapego" (Deepak Chopra). El SER o ESPÍRITU emite señales al cuerpo de placer o gozo en vibraciones altas, o tristeza y angustia en vibraciones bajas y los paradigmas que forman el EGO emiten señales de comodidad o incomodidad dependiendo si el pensamiento interno o externo que experimentamos en un momento dado, se alinea o no con ellos. Es por esto que cada vez que intentamos cosas diferentes, no exploradas, aunque sabemos que son para nuestro mayor bien, no lo hacemos, o lo abandonamos, es como recibir un "varillaso" desde el interior que nos pone nuevamente en la ruta conocida.

Ahora pensemos lo siguiente, ¿cómo podemos poner de acuerdo al EGO y al ESPÍRITU para ambos nos envíen señales de comodidad y placer? Parece complicado, aunque hay documentadas mil de formas diferentes, me encuentro probando el Método de la Transposición Cibernética del genio Stuart Lichtman, donde logras encontrar claramente cuales son los paradigmas que emiten señales de comodidad y que al mismo tiempo hacen que el ESPÍRITU envíe tristeza. Esta es la clave, esos son los paradigmas que debemos cambiar para experimentar plenitud. Entendiendo por plenitud la mezcla de comodidad y placer en cada pensamiento, actitud, habito y conducta.

Cuando se experimenta plenitud la mayor parte del día, se abren canales por donde comienza a fluir grandes caudales de energía. Esta energía es pura creatividad, es pura potencia, al pasar por nuestro cuerpo nos deja conocimiento, conclusiones, inventos, obras de arte, textos, literatura. Mientras esa energía fluye por nuestro cuerpo, la podemos direccionar hacia el cumplimiento de nuestras metas, para ayudar a los demás o simplemente para potenciarla y devolverla al universo aumentada.

Al lograr sentir mayor plenitud cada día, hora, minuto o segundo, no importan en que momento acabe nuestra vida terrena, la definiremos como "una vida feliz".

Espero que esta información que me llegó en forma de manzanazo en la cabeza.. nos sea de utilidad y podamos usarla para nuestro mayor bien y el de todas las personas involucradas.

Un fuerte abrazo!!..


Daniel