Me adelanto un poquito a tu día papá, para regalarte lo más alto y grande que puedo: mi gratitud y reconocimiento. Te cuento que estas palabras que siguen, las tengo escritas muy cerca y las leo cada vez que algún fantasma ronda este hermoso camino de crecimiento:
Gracias papá:
Por haber encontrado el camino para formar tu familia.
Por haberme dado la vida junto a la mejor mamá del mundo que elegiste para mi.
Por haberme cuidado de peligros en mi niñez.
Por haberme enseñado la cultura del trabajo con el ejemplo.
Por haberme enseñado los valores de la responsabilidad.
Por haber seguido de pie y caminando, cuando todo parecía en el suelo.
Por soportar mi rebeldía de niño y adolescente.
Por cuidarnos en silencio, como un ángel de la guarda en cada aventura.
Por enseñarme la mejor forma de hacer las cosas: despacio pero constante, y hoy es mi mayor recurso en el trabajo.
Por tus charlas, por tu compañía bajo los pinos, por ese viaje a los médanos cuando era niño.
Por haber limpiado el patio donde aprendí a andar en bicicleta.
Por tomar cada decisión que nos hizo una mejor familiar.
Por superar tus propios fantasmas.
Por ayudarme y apoyarme en cada error que cometí.
Por salvar mi dignidad cuando mis errores eran evidentes.
Por esa CUARENTENA de 60 días que vivimos juntos.
Por tus consejos, tus historias, tu opinión y simpleza sobre la vida.
Por tus palabras tan importantes para mi: VOS SIEMPRE FUISTE VALIENTE, DE CHIQUITO.
Por darme una gran mano, tal vez sin saberlo, para que yo sea un mejor padre.
Por fomentar y permitir que me supere, aún más allá de tus logros.
Gracias por tu mano en mi hombro cada vez que la necesito y mil gracias por los mejores hermanos del mundo Carlos Sanchez, Ines Margarita Sanchez, Graciela Sanchez, Jorge Sanchez y ese angelito que cumplió su objetivo en la vida tan rápido.
Por haber encontrado el camino para formar tu familia.
Por haberme dado la vida junto a la mejor mamá del mundo que elegiste para mi.
Por haberme cuidado de peligros en mi niñez.
Por haberme enseñado la cultura del trabajo con el ejemplo.
Por haberme enseñado los valores de la responsabilidad.
Por haber seguido de pie y caminando, cuando todo parecía en el suelo.
Por soportar mi rebeldía de niño y adolescente.
Por cuidarnos en silencio, como un ángel de la guarda en cada aventura.
Por enseñarme la mejor forma de hacer las cosas: despacio pero constante, y hoy es mi mayor recurso en el trabajo.
Por tus charlas, por tu compañía bajo los pinos, por ese viaje a los médanos cuando era niño.
Por haber limpiado el patio donde aprendí a andar en bicicleta.
Por tomar cada decisión que nos hizo una mejor familiar.
Por superar tus propios fantasmas.
Por ayudarme y apoyarme en cada error que cometí.
Por salvar mi dignidad cuando mis errores eran evidentes.
Por esa CUARENTENA de 60 días que vivimos juntos.
Por tus consejos, tus historias, tu opinión y simpleza sobre la vida.
Por tus palabras tan importantes para mi: VOS SIEMPRE FUISTE VALIENTE, DE CHIQUITO.
Por darme una gran mano, tal vez sin saberlo, para que yo sea un mejor padre.
Por fomentar y permitir que me supere, aún más allá de tus logros.
Gracias por tu mano en mi hombro cada vez que la necesito y mil gracias por los mejores hermanos del mundo Carlos Sanchez, Ines Margarita Sanchez, Graciela Sanchez, Jorge Sanchez y ese angelito que cumplió su objetivo en la vida tan rápido.
Gracias papá, gracias de corazón y FELIZ DIA DEL PADRE!!!...
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